Cincuenta veces no

No hagas eso, no te quejes, no digas nada, no pienses, no te relajes, no se te ocurra. No, negación volcada del error, rechazo de cuanto intentas y no alcanzas. No, laberinto de la razón tan necesario como innecesario, rechazado por representar la sobriedad de una realidad contraria y desaprobada. Sigue leyendo Cincuenta veces no