La fantasía de reagrupación. Infancia y separación familiar.

«Yo quiero que mi madre y mi padre estén juntos otra vez». Esta frase no he dejado de escucharla una y otra vez en los 25 años que llevo ayudando a niños y a niñas a aceptar y a afrontar los procesos de separación y transformación de sus familias. Me confiesan, entre risas nerviosas y lágrimas, que les dejan notas, dibujos, pequeños regalos, falsean comentarios de los unos hacia los otros, niegan la separación de sus padres delante sus amigos o engañan a todos alardeando de ser felices porque: «así tengo dos casas y me hacen más regalos; o separados por lo menos ya ellos no se pelean todo el tiempo». Sigue leyendo La fantasía de reagrupación. Infancia y separación familiar.

Papá, te presto mi mirada de niña. Quiero que veas todo lo que yo veo.

Papá, sólo soy una niña, y quiero disfrutar de mi forma de ver el mundo, y de mi manera de vivir el tiempo. Mírame como lo que soy, un trocito de ti, pero no como algo tuyo, porque yo creceré y seguiré siendo tu hija, pero no como una pertenencia ni como un trofeo.

Papá, sólo soy una niña que sueña con jugar, porque ahora es el momento, ahora es mi momento. Ahora tendrás que mirar las cosas como yo las veo, porque, donde tú ves una toalla, yo veo una capa para volar, o cuando miro mi cama, me la imagino como un barco mientras las sábanas lo convierten en velero. Sigue leyendo Papá, te presto mi mirada de niña. Quiero que veas todo lo que yo veo.

Infancia y violencia: consecuencias.

Violencia de género, violencia machista, violencia doméstica, violencia filioparental, violencia callejera, violencia deportiva… Sí, somos violentos y no siempre funciona bien nuestro cerebro, y los impulsos no se contienen, y la agresión -en todas sus formas- se convierte en un modus operandi, en una manera peligrosa de vivir. La conducta agresiva ha estado presente en todas las épocas y se da en todas las culturas. En la infancia también ocurre, centrando su actividad principal en la edad de la escolarización formal, entre lo seis y los dieciséis años, aproximadamente. Sigue leyendo Infancia y violencia: consecuencias.

El exceso de extraescolares. La generación triste.

“Hemos criado niños bilingües, trilingües algunos; niños que nadan como peces, que juegan al fútbol como ases, que practican todo tipo de gimnasia, que bailan lo que les pongas, que hacen robótica, que tocan instrumentos, que juegan al ajedrez…  Hemos criado a toda una generación desarrollando capacidades a golpe de extraescolares. Pero… ¿Son felices?”

Sigue leyendo El exceso de extraescolares. La generación triste.

Yo de mayor quiero ser Youtuber.

Ahora los niños quieren ser Youtubers y las niñas Instagramers; venga, todos Referencers mega happies. Quieren prestigio, necesitan reconocimiento, y sólo buscan coleccionar Likes en las muchas redes sociales –gratis- disponibles. Y los padres encantados. Viste mucho tener un niño famoso o una niña artista, y si además huele a negocio fácil, ni que decir tiene que nos convertimos en fanáticos asesores al servicio de ridículos protagonistas.

Sigue leyendo Yo de mayor quiero ser Youtuber.

La educación no vende, la educación no importa.

Todos sabemos que la educación no es una prioridad en nuestro país, y esta afirmación no la pienso argumentar ya que son los resultados quienes más y mejor la sustentan. Todos sabemos que nuestros hijos pasan jornadas interminables a veces en los centros educativos, así como también sabemos que éstos no están bien dotados de recursos humanos ni materiales.

No, la educación tal como la están tratando no vende ni venderá; le falta chicha, le falta tirón, le falta marketing, le falta interés, prioridad y sobre todo voluntad. La descentralización de las competencias educativas a favor de las CCAA Sigue leyendo La educación no vende, la educación no importa.

Decálogo no ideal para ejercer de madre o padre, pero real.

1.-  ¡Comerás huevos! Descubrir el enigma de esa frase tan repetida en casa y que nunca terminábamos de comprender del todo bien.

2.- ¡Que me dejes! Tomar conciencia de que nuestros hijos no nos necesitan al lado en todo momento porque lo que quieren es jugar o estar solos.

3.- ¡Vaya tela! Aceptar que nuestros hijos nunca van a ser Sigue leyendo Decálogo no ideal para ejercer de madre o padre, pero real.

Infancia y música de adultos; el penúltimo despropósito.

De los Canta Juegos al reggaeton, así es el salto musical que obligamos a dar a nuestros hijos, y lo triste además es que no hay mucha más alternativa. No hay apenas música disponible a partir de los seis años, y entregamos a nuestros hijos a la hoguera de las vanidades, canciones con letras pésimas y para colmo, ofensivas, groseras, violentas y sexistas. Si queríamos hacerlo mal, lo estamos bordando. Sigue leyendo Infancia y música de adultos; el penúltimo despropósito.

Demasiado amor para tan poca disciplina.

Inteligencia emocional, educación emocional, salud emocional, desarrollo emocional, bienestar emocional, control emocional; todo termina con el mismo concepto y bajo el mismo paraguas de lo emocional, y no, no sólo vivimos de emociones. Hace falta la otra pata de la mesa, la que soporta y permite el equilibrio entre lo emocional y lo conductual, entre lo placentero y lo necesario, entre la devoción y la obligación. Tanta sobre atención hacia las emociones nos está convirtiendo en personas altamente sensibles pero incapaces de llevar a cabo grandes esfuerzos cuando el contexto lo demanda. Sigue leyendo Demasiado amor para tan poca disciplina.

Derechos Humanos Básicos

1. El derecho a mantener tu dignidad y respeto comportándote de forma habilidosa o asertiva (incluso si la otra persona se siente herida) mientras no violes los derechos humanos básicos de los demás.

2. El derecho a ser tratado con respeto y dignidad. Sigue leyendo Derechos Humanos Básicos